En este Post te cuento cómo, con Reflexología, ayudamos a nuestros hij@s cuando sufren cólicos de lactante.

¿Qué es?

El cólico del lactante es un problema frecuente que suelen sufrir los niños en los 3 primeros meses de vida. En cuanto a las causas que lo producen son muchas las hipótesis que se dan pero lo cierto es que no hay una razón concreta que produzca esta reacción tan dolorosa e incómoda para nuestros bebés. Se habla de intolerancia a la lactosa, gases, inmadurez del tracto digestivo etc…

La realidad es que, nosotros como padres, no queremos ver sufrir a nuestros hijos y menos si les podemos ayudar de una forma casi inmediata, relativamente sencilla y natural.

Síntomas

Los síntomas más comunes son:

  • Llanto inconsolable, acompañado de un color rojizo en su rostro debido al llanto
  • Se suelen poner rígidos, están inquietos, molestos. No se calman con alimento/pecho
  • La flexión de sus piernas hacia el abdomen es algo característico. E incluso que tengan el estómago hinchado
  • En ocasiones regurgitan leche, presentan estreñimiento o incluso diarrea

¿Qué podemos hacer?

La Reflexología en estos casos es un remedio fantástico y de inmediato resultado. Hay que destacar, que el momento en el que el bebé está sufriendo el cólico, seguramente no nos deje trabajar de forma cómoda con su pie. Con lo que si se nos diera el caso de tener que hacerlo en un momento crítico, tendrá que ser con mucho amor, paciencia y mucha suavidad… no se debe ejercer demasiada presión sino más bien ser sutiles en los reflejos a trabajar.

Se debe intentar trabajar todos los días con nuestro pequeño para evitar las “crisis”, es más, si podemos, lo mejor es hacerlo en momentos que se encuentre bien. De este modo nos adelantamos a posibles dolencias durante el día. Los resultados serán evidentes desde el primer momento que lo trabajemos.

Cuáles son las zonas a trabajar

  1. Todo el aparato digestivo: esófago, estómago, intestino delgado, intestino grueso
  2. Zonas de relajación: plexo solar y columna vertebral
  3. Glándula pituitaria y los reflejos de cabeza
  4. Ganglios linfáticos
  5. Drenaje linfático: este drenaje es muy relajante y suave que posiblemente haremos que se duerma durante él

Algunas recomendaciones

  • NUNCA se debe trabajar después de una toma o una comida, mínimo dejar pasar las horas de digestión.
  • NO es necesario trabajarlo todo, de hecho en el mayor caso de las veces, nuestro bebé se cansará antes o incluso no nos dejará continuar. Con lo que se trabaja lo que nos de tiempo, priorizando sistema digestivo y zonas de relajación.
  • A tener en cuenta que los pies de nuestros bebés tienen una superficie tan pequeña que con nuestro pulgar presionamos varios reflejos a la vez, con lo que es relativamente sencillo trabajar varios órganos en el tiempo reducido que nos permiten.

¿Quién puede/debe ayudarnos con los cólicos lactantes?

  1. Durante los 3 primeros meses de la vida del bebé se recomienda que sea la madre la que realice este tratamiento, ya que genera un vínculo especial y una conexión única entre ellos. Ahora bien, hay que acudir a un profesional para que enseñe la técnica y cómo trabajar los puntos concretos, el agarre del pie, los movimientos etc…
  2. Si por cualquier causa la madre no quisiera a partir de los 45 días más o menos de vida, un profesional puede trabajar con el bebé.
  3. Si los cólicos perduran más meses, pueden ser tanto la madre como un profesional los que ejerzan la terapia.
  4. Si los cólicos han cesado, no estaría mal que el niño, aunque no tenga ningún malestar,  recibiera sesiones de reflexología ya que fortalece su sistema inmunológico y le ayudará a prevenir posibles enfermedades.